LICENCIADA EN PSICOLOGÍA.UNIVERSIDAD AUTONOMA DE MADRID 1998. PSICOPEDAGOGA.UCM.2005

sábado, 23 de febrero de 2013

LOS NIÑOS CON DIFICULTADES DE APRENDIZAJE


¿Como podemos identificar si nuestro hijo tiene dificultad de aprendizaje? ¿Que características tienen los alumnos que presentan esta dificultad? ¿Como debemos actuar ante este problema?
Las dificultades de aprendizaje se identifican, cuando algunos alumnos no aprenden en el contexto del aula, con los recursos ordinarios y se observa un desfase entre ellos y sus compañeros, principalmente en aprendizajes básicos, que por su edad ya deberían haber alcanzado.
Las dificultades de aprendizaje, son principalmente desaptaciones, en el curso de los procesos educativos.
Se refieren no sólo a dificultades para aprender a leer o escribir, sino a las exigencias y características concretas del aula.
La prevalencia de este tipo de trastorno en la población, oscila entre un 2-10%. Habitualmente los niños que presentan trastorno de aprendizaje en lectura o cálculo, no lo presentan sólo en una sola área, sino en todas.
Los niños con dificultades de aprendizaje suelen presentan una serie de caracteristicas comunes a nivel académico:
  • Falta de habilidad para resolver problemas.
  • Retrasos importantes en el rendimiento académico.
  • Capacidades académicas desiguales.
  • No se involucra activamente en las tareas de aprendizaje.
  • Pobre desarrollo cognitivo y del lenguaje.
  • No ha adquirido las capacidades básicas de lectura.
Desde el punto de vista social y conductual suelen presentar además las siguientes características:
  • Inmadurez social.
  • Elección de patrones de conducta ,menos aceptados socialmente.
  • Suele malinterpretar las indicaciones soicales y las conductas no verbales.
  • No toma decisiones adecuadas.
  • No sabe predecir, las consecuencias de sus conductas.
  • Experimenta rechazo por parte de sus compañeros.
  • Es tímido, distraído y se aisla.
  • No presta atención en clase y se distrae facilmente.
  • Es impulsivo y movido, lo que a veces puede confudirse con deficit de atención por hiperactividad.
  • Tiene una pobre coordinación motora y escasas capacidad, de relación espacial.
  • Es desorganizado.
  • Es muy dependiente del profesor y de sus compañeros de clase.
Las dificultades de aprendizaje es un deficit que puede persistir de por vida, sino recibe el tratamiento psicopedagogico adecuado y el apoyo escolar necesario. Probablemente el apoyo sea necesario durante bastante tiempo, en algunos casos años.
Lo más importante en estos casos es ser consciente del problema y proporcionarle al alumno la ayuda, los conocimientos básicos y los cimientos necesarios sobre los que construir su propio aprendizaje.
Este tipo de alumnos necesitan un apoyo importante en conocimientos y herramientas, aunque el objetivo fundamental sea posteriormente retirar esta ayuda, cuando por si mismo consiga realizar sólo su aprendizaje. La falta de autoestima y confianza en si mismos que se genera en estos alumnos puede hacer que el proceso sea más costoso, aunque no imposible de alcanzar.



lunes, 18 de febrero de 2013

¿LENTITUD EN APRENDER O DIFICULTAD DE APRENDIZAJE?

Cuantas veces no se habrán preguntado algunos padres: ¿Tiene mi hijo dificultades para aprender o es simplemente, que aprende a un ritmo más lento?.
Los niños lentos en aprender, presentan dificultades para seguir un ritmo de aprendizaje normal, por presentar problemas de memoria, junto con una menor capacidad de atención a estímulos verbales y de expresión, además de dificultades para evocar y recuperar la información aprendida.
Pero este tipo de niños, no podrían ser categorizados de discapacidad intelectual, ni tampoco en el grupo de niños con dificultades de aprendizaje. Las características educativas, que estos niños presentan en su aprendizaje son:
  • Lentitud para procesar la información escolar y seguir mismo  ritmo de aprendizaje, que el resto de sus compañeros.
  • Inadecuación entre, el nivel de desarrollo de sus estructuras cognitivas y el grado de complejidad de los contenidos escolares.
  • Baja motivación para aprender, seguido de baja autoestima.
  • Inadecuación entre sus habilidades psicolingüisticas y el lenguaje utilizado por el profesor.
  • Falta de autonomía, necesaria para el establecimiento de sus propias estrategias, para estudiar o memorizar.
En el aula estos niños suelen mostrar:
  • Dificultad para finalizar sus tareas.
  • Escasa atención.
  • Bajo nivel de perseverancia.
  • Falta de asertividad, en relación con la autoridad y dificultad para hacerse escuchar.
La instrucción de los niños con esta problematica, pasa por una evaluación psicopedagógica de sus capacidades, intereses y motivaciones. El estilo de enseñanza, el tipo de tareas de aprendizaje e incluso organización del aula, son muy importantes para el desarrollo intelectual y el rendimiento escolar en niños con esta problemática.
La mayoria de los niños, pueden lograr un nivel de aprendizaje adecuado, si reciben una instrucción graduada a partir del nivel de funciones, previamente diagnosticadas. Además de ayuda oportuna, a través del desarrollo de estrategias cognitivas y tiempo necesario para el aprendizaje.
Se deben tener en cuenta, tres variables básicas, en el esquema de la educación de niños con esta problemática:
  • Valorar el grado, en el que posee las destrezas básicas, de aprendizaje que debe cumplir.
  • La motivación que tiene, para comprometerse con su aprendizaje.
  • Valorar la extensión, en la cual la instrucción dada en su aprendizaje, es apropiada para el niño.
En el esquema educacional de estos niños con aprendizaje lento, se debe de tomar en cuenta por tanto tres factores: el desarrollo de las destrezas básicas, la velocidad para aprender y la motivación que tengan.
Las características que presentan estos niños, nos hacen pensar en la elevada posibilidad de que este tipo de alumnos pueda desarrollar dificultades de aprendizaje, sino se interviene correctamente y a tiempo.

lunes, 11 de febrero de 2013

LAS HABILIDADES SOCIALES


¿Son las habilidades sociales las que definen el éxito en la vida?
¿Nos ayudan a ser más felices?
¿Podemos llegar a conseguir lo que queremos, con buenas dosis de habilidad social?
¿Porque son tan importantes las habilidades sociales?
Conocemos algunas personas famosas o populares que tienen éxito en la vida, probablemente uno de sus secretos sea la habilidad social, ese tipo de habilidad que algunas personas poseen de forma más o menos innata y otros en cambio tenemos que aprenderlo.
Muchas veces en la vida, hemos deseado conseguir cosas que nos han costado tiempo y esfuerzo, con ayuda de los demás podrían haber sido más faciles, pero ¿como conseguir esa ayuda? ¿que es lo que hace que unas personas, obtengan de los demás lo que quieren? ¿Como conseguir tener éxito en las relaciones sociales y ser una persona valorada y apreciada por los demás?
Una de las partes más importantes en una relación social es la comunicación. La comunicación indica lo que somos, lo que pensamos, lo que queremos y lo que deseamos. Como expresar esa información para que los demás lo entiendan correctamente, es el objetivo que toda persona busca cuando comunica.
En la comunicación los gestos, la imagen (la comunicación implicita), es tan importante o más que la explicita.
Cuando nos relacionamos con los demás, debemos cuidar no sólo la comunicación explicita, sino también y además la implicita, a veces esta nos delata, aunque con las palabras estemos indicando lo contrario. 
La comunicación es uno de los factores, que nos ayudan a conseguir el preciado tesoro de la habilidad social, pero también existen otros como:
  • La forma en la cual iniciamos el contacto en nuestras relaciones y lo mantenemos.
  • Nuestra forma de resolver conflictos.
  • O incluso de negociar.
Vamos con el primero de los factores, la comunicación, ¿Que falla cuando no nos comunicamos con los demás correctamente?.
La comunicación puede fallar por muchos motivos; nuestro estado emocional (nos puede dificultar la percepción del mensaje, aunque nuestro interlocutor lo expresa de forma correcta), la forma en la que nos expresamos ( acusaciones, amenazas, exigencias, etiquetas, generalizaciones, consejos prematuros y no pedidos, sarcasmos, cortes de conversación, preguntas reproches, justificación excesiva, interpretar o hacer diagnósticos sin escuchar).
Sin embargo las personas que saben comunicarse correctamente, es porque utilizan de forma correcta los siguientes elementos comunicativos: escuchan activamente a los demás, empatizan, saben hacer preguntas abiertas o específicas dependiendo de la situación, expresan correctamente sus deseos y los mensajes del yo, utilizan siempre información positiva y saben ser recompensantes en la comunicación con los demás.
Pero para tener buenas relaciones sociales, también es importante la forma en la que iniciamos el contacto y lo mantenemos.
Las personas que saben iniciar bien las relaciones, es porque saben hacer lo siguiente: tienen empatía y simpatía, son coordiales y afectivos, son naturales, espontaneos y sinceros, tienen confianza en si mismos, valoran al interlocutor y muestran interés por el otro.

Para tener éxito en las relaciones sociales, no sólo hay que saber iniciar el contacto, sino además saber mantenerlo cuidando las siguientes habilidades: saber ser reforzante en las relaciones, saber poner límites, ser constantes, saber hacer y recibir críticas, ser honesto y mantener compromisos, ser  flexible y tolerante ampliando los puntos de vista, pensar en positivo y con sentido del humor.
En las relaciones sociales a veces surgen conflictos, que hay que solucionar, es algo natural y forman parte de ellas. No son los conflictos los causantes de una mala relación, sino como los solucionemos es lo que determina, que una relación sea o no exitosa.
Algunas personas tienen más habilidades que otras para hacerlo, pero ¿Como lo consiguen?.
Para responder a los conflictos exiten tres formas de hacerlo: de forma pasiva, agresiva o asertiva (esta última es la más adecuada en las relaciones sociales) ¿En que consiste?.
La forma asertiva de resolver un conflicto, es indicando lo que una persona quiere o desea de otra, pero mostrando respeto hacia ella, de modo directo y honesto, se utilizan "mensajes yo" en los que se indica con claridad, el origen personal que no impositivo, de los deseos opiniones y sentimientos.
Otras veces para que las relaciones sociales sigan manteniendose hay que saber negociar. Negociar es una aproximación de intereses entre dos partes, hasta conseguir un acuerdo equilibrado para ambos.
La negociación se basa en la idea de que, aunque las partes implicadas difieren en sus intereses, comparten un interés común por encontrar una solución negociada.
El objetivo más deseable, no es el de tratar de salir vencedor a cualquier coste, sino el de llegar a un acuerdo equilibrado, que ambas partes consideren aceptable.
La posición vital de la negociación es yo gano, tú ganas.
Las habilidades sociales es algo que hay que trabajarse dia a dia y relación a relación. Es una parte importante de la vida, en la que la imagen que mostremos de nosotros mismos, cuenta tanto o más, como lo que queramos expresar.

sábado, 2 de febrero de 2013

AYUDAR A LA MEMORIA


La memoria es un marco cambiante: se construye rápidamente en los primeros años de vida, luego se desarrolla más lentamente, cambia continuamente y, finalmente, se debilita bajo el impacto de los diversos ataques a los que está sujeto el cerebro [....]
JACQUES BARBIZET (1969,P.258)

 
A medida que envejecemos se producen cambios en nuestra mente, aunque no todas las funciones de memoria y aprendizaje se alteran con la edad, algunos fallos de memoria no son necesariamente indicativos de un deterioro cognitivo. Todos sabemos que cuando llegamos a la edad adulta, nos cuesta más aprender las cosas y los fallos de memoria, aprecen más facilmente, nuestra capacidad de memoria ya no es la que era.  Con un poco de entrenamiento podemos compensar los fallos de memoria propios del envejicimiento y minimizar sus efectos.
 ¿Que podemos hacer para ayudar a nuestra memoria? ¿Que recursos podemos utilizar?
Las estrategias o recursos que podemos utilizar, para facilitar el trabajo a nuestro cerebro, en esta actividad tan importante son:
  • Potenciar el significado de los sucesos y detalles de nuestras experiencias personales, darle a la información un significado personal, ayuda a convertirlo en memoria duradera.
  • No autopenalizarse por los olvidos, hacer esto sólo genera más ansiedad, interfieriendo en el propio proceso de memorización. Es mejor utilizar ayudas, anotaciones o hitos recordatorios.
  • La perdida sensorial, alteración visual o perdida auditiva, puede distorsionar la información que llega de la memoria sensorial y cuando esta ve limitada, también se limita la memoria a corto plazo y a largo plazo. Son importantes las revisiones periódicas y utilizar las correciones pertinentes.
  • La falta de interés o una baja atención, dificultan el registro o codificación de la información. Nuestro propio estado emocional condiciona la capacidad de atención, deberemos controlarlo en el proceso de memorización, si queremos que nuestra memoria rinda. Si por ejemplo estamos tratando de hacer varias cosas a la vez o estamos pensando en otras cosas, no nos percataremos de donde estamos dejando las llaves o las gajas, o no registraremos el nombre de la persona que acabamos de conocer. Tranquilizarse y centrarse en las cosas de una en una, es lo más importante, trate de dirigir la atención, a quellas cosas que desea recordar. Si le rodean muchas distracciones, el ir a otra habitación o lugar más tranquilo, funciona bien, también anotar o escribir los pensamientos que le distraen para prestarles atención en otro momento y no olvidarlos, le permitirá centrarse en lo que es importante en ese momento.
 Pero otras veces lo que más nos cuesta es recuperar la información de nuestra memoria a largo plazo. ¿Como podemos compensar, el enlentecimiento de la velocidad de procesamiento, al evocar?.
  • Cuando no resulta fácil recuperar información, una estrategia es emplear pistas contextuales: tratar de evocar en que lugar nos encontrabamos, que estabamos haciendo, con quién o sobre que estabamos hablando, que otras cosas se trataron también en ese momento etc. Funciona como una red de interconexiones en el cerebro, una vez que se empieza a recuperar información específica sobre el momento, lugar, asistentes, etc, comienzan a fluir los detalles.
  • Dormir bien. Cuando se duerme mal, las capacidades cognitivas se ven repercutidas. A medida que nos hacemos mayores el patrón del sueño suele ir variando: se tiende a dormir menos, el tiempo de sueño profundo es menor, siendo más largas las fases de sueño ligero. Cuando por la noche no se duerme lo suficiente o el sueño no es reparador, por su mala calidad, además de estar soñoliento durante el día, se suele procesar más lentamente la información. Nos cuesta más aprender cosas nuevas, mantener la atención, la memoria falla, se hace díficil razonar y reflexionar, dificultades que se atribuyen facilmente a la edad, cuando en ocasiones son consecuencia de falta de sueño. Si se tienen estos problemas, habrá que consultar al médico para que le ayude a mejorar el sueño.
  • Reestructurar nuestro estilo de vida o cambiarlo, asegurando un sueño suficiente y reparador, realizar ejercicio físico, llevar una adecuada alimentación y perseguir unos objetivos cotidianos asequibles, tendrá un efecto positivo en nuestra memoria y de forma global en nuestras capacidades mentales.

viernes, 1 de febrero de 2013

LA ANSIEDAD EXCESIVA O GENERALIZADA



Los trastornos de ansiedad son uno de los problemas psicológicos más diagnosticados durante la infancia o adolescencia.
¿Pero que es la ansiedad? ¿Existen varios tipos de ansiedad? ¿Como podemos identificarla? ¿Que debemos hacer ante este problema?
Los datos epidemiológicos nos indican que los trastornos de ansiedad que prevalecen son: la fobia simple, la ansiedad de separación y la ansiedad excesiva o generalizada.
La ansiedad debe considerarse inicialmente como un sentimiento normal en la vida del menor, es una respuesta a situaciones amenazantes o estresantes. Debemos considerar que esta es patológica, cuando surge sin un desencadenante aparente, de forma autónoma, o cuando surge como respuesta desproporcionada a una situación real. Esto es precisamente lo que caracteriza a la ansiedad excesiva o generalizada, que aparece sin apenas relación con ningún acontecimiento determinado, que justifique dicha respuesta. La timidez, cierto grado de aislamiento social, un exceso de responsabilidad y un miedo intenso al fracaso, son inidicativos de que se padece este trastorno.
Estos niños o adolescentes suelen encontrarse en un estado de inquietud casi permanente, el miedo y la preocupación involucran muchos aspectos de su vida. Esta preocupación se centra en conductas pasadas, acotecimientos futuros y en un correcto cumplimiento de sus obligaciones.
Suelen sobreestimar la probabilidad de consecuencias negativas, exageran el resultado previsto de acontecimientos con baja probabilidad de que ocurran, e infravaloran su capacidad de afrontar cosas poco agradables.
Pueden sufrir numerosos sintomas somáticos (palpitaciones, dolor de estómago, mareos y trastornos del sueño) y hábitos nerviosos (morderse las uñas, tics, etc.). Buscan la reafirmación por parte del adulto y la aprobación de los demás.
Los menores con hiperansiedad se muestran extremadamente responsables, por lo que no suelen plantear problemas  en el colegio e incluso pueden ser bien valorados por los profesores, en las etapas iniciales del trastorno. El rendimiento académico y la opinión de los demás acerca de su ejecución, son estimulos que suscitan en él más ansiedad.
La acumulación de sucesos estresantes y una cierta vulnerabilidad individual, están relacionadas con la etiología de este trastorno, pudiendo llegar a provocar su cronificación.
Los criterios que deberían ayudarnos a diferenciar la ansiedad normal de la patológica son:
  • La incapacidad del sujeto para recuperarse, ante un suceso dado.
  • La respuesta de ansiedad no se encuentra sincronizada, desde el punto de vista evolutivo.
  • El grado de intensidad de los síntomas de angustia y de sus disfunciones, nos hacen pensar que la respuesta es desproporcionada.
La presencia de crisis de ansiedad provoca un conjunto de síntomas, que interfieren en el funcionamiento cotidiano del niño o adolescente y repercuten negativamente en su contexto escolar, familiar y en su interacción social con los iguales.
Por eso cuando percibamos que puede existir un problema de este tipo, deberemos buscar la volaración de un profesional, para que este nos indique el tratamiento y las mejores pautas de actuación en cada caso.