LICENCIADA EN PSICOLOGÍA.UNIVERSIDAD AUTONOMA DE MADRID 1998. PSICOPEDAGOGA.UCM.2005

miércoles, 23 de enero de 2013

¿COMO MEMORIZAMOS?


La Memoria explicita o declarativa cuando falla es la que más suele preocuparnos, este tipo de memoria es muy sensible a los efectos del envejecimiento sobre todo la memoria episódica. En nuestro dia a dia recibimos gran cantidad de información, pero debemos filtrar y seleccionar aquello que queremos retener y desechar la información que no nos interesa. ¿ Como es este proceso de decisión? ¿Como decidimos que recordar y que olvidar? ¿Influye el estado mental y físico en la memorización y el recuerdo? y ¿la situación en la que nos encontremos es también importante, para llevar a cabo con éxito este proceso?
Cuando la información es recibida por nuestros sentidos, pasa primero por lo que llamariamos una fase de registro, en esta fase nuestras experiencias serían filtradas por una memoria sensorial, en esta memoria la información se retiene sólo un instante, nuestro cerebro interpreta esta información a través de nuestros sentidos, por medio de la atención. Cuanto más enriquecido sea este registro fijandonos en multiples detalles del objeto percibido y realizando asociaciones, más resistente será la información al olvido y por más vias podremos acceder luego a la información para recuperarla.
Las cosas que llamarían nuestra atención en la memoría sensorial, pasarían posteriormente a la fase de almacenamiento, por medio de nuestra memoria a corto plazo con una capacidad limitada 5+,-9, la información sería procesada activamente y traducida a una representación mental con significado. Este procesamiento activo se produciría mediante repetición de información, ensayo, visualización o asociación con otras informaciones. Esto es lo que llamamos proceso de codificiación en el que la información pasaría de ser una información sensorial, a transformarse en una información mental almacenada. Cuanto más activamente se procese esta información y mayor implicación tenga para el que quiere guardarla y  recuperarla, más facil nos será recuperar posteriormente dicha información. Al concectar este nueva información con la ya existente, en nuestra memoria a largo plazo, el cerebro formaría asociaciones dandole sentido a la nueva información.
Según la hipótesis cientifica de los niveles de procesamiento, a mayor profundidad de codificación de cualquier estimulo percibido, mejor recuerdo. Por eso los fragmentos sueltos de información que memorizamos, son más dificiles de recuperar, que aquellos fragmentos de información que memoricemos, asociandolos a información, que ya tenemos almacenada.
La codificiación de la información, es un paso previo a la consolidación de la información en la memoria a largo plazo. La consolidación de la información se produce por tanto, con mayor profundidad de codificación de la información.
La última fase en este procesamiento de la información recibida sería, el de evocación o recuperación de la información almacenada. Existen distintas formas de evocación:
- Una de ellas es la evocación libre, recuerdo directo de la información, son aquellos recuerdos que realizamos sin ayuda de por ejemplo ninguna lista, sino espontaneamente.
-Otra forma sería mediante reconocimiento de la información mostrada, disponiendo de distintas opciones visuales, nos permitiría recordar la correcta.
-De forma facilitada, sería la forma de evocación en la que si registramos de forma organizada y trabajada la información percibida, es decir, hacemos el esfuerzo de categorizar y hacer grupos de la información al almacenarla. Podemos en la evocación de la información, valernos de estas categorias, para recuperar información concreta que necesitemos de cada uno de estos grupos.
-La última forma de evocación sería la inducida, sucede cuando sin pretenderlo nos viene a la mente recuerdos, a partir de un determinado estimulo asociado.
El proceso de memorización requiere de cierto esfuerzo que dependerá, del contenido de lo que se quiera recordar y de lo facil que nos resulte asociarlo, a la información ya existente en nuestro cerebro. Pero lo que nunca debe darse por supesto, es que se recordará algo, por lo que no se ha hecho ningún intento deliberado por recordarlo.
Todo este proceso de memorización se puede ver contaminado por la propia situación y el estado en el que se encuentre la persona que lo realiza. Los estados de estrés, ansiedad, depresión, problemas de insomnio, influyen negativamente en la codificación y la recuperación de la información, pudiendo interrumpirlas y provocando que sea  más dificil, llevar este proceso a cabo con éxito.
El tipo de vida que llevemos y nuestra salud, influyen en el proceso de memorización y recuperación de la información, tanto o más que el propio proceso de envejecimiento.
En el proceso de memorización, no sólo debemos tener en cuenta como tratamos la información que luego queremos recuperar, sino en que estado o situación lo hacemos y bajo que influencias lo realizamos.

martes, 22 de enero de 2013

EL COMPORTAMIENTO NEGATIVISTA DESAFIANTE EN NIÑOS


¿Cuantos padres no han comentado alguna vez que sus hijos no les hacen caso, que son desobedientes y que les desafian? ¿Debemos considerarlo un problema de conducta si este persiste en el tiempo?  ¿Como debemos actuar para que el problema se solucione y no derive en otros más importantes?
Los niños con trastorno negativista desafiante, siguen un comportamiento polémico de desobediencia, provocación, desafío y hostilidad hacia las figuras de autoridad. Estos comportamientos negativistas y desafiantes se expresan en la testarudez persistente, resitencia a las órdenes y renuncia al compormiso.
¿Pero que sintomatología muestran estos niños?
La sintomatología más característica en este trastorno se compone de :
- Accesos de cólera.
- Discusiones.
- Desafiar activamente o negarse a cumplir las demandas o normas de los adultos.
- Llevar a cabo premeditadamente actos que sabe, que molestarán a otras personas.
- Acusar a otros de sus propios errores o comportamientos inadecuados.
- Sentirse facilmente molestado por otros.
- Mostrarse irascible y resentido.
- Ser rencoroso o vengativo.
 ¿Cuando nos deben resultar estos sintomas preocupantes?
Para poder calificar a un niño con este trastorno, los comportamientos que realiza deben aparecer con más frecuencia de la propiamente observada en niños de la misma edad y nivel de desarrollo. Produciendole además un deterioro significativo en su actividad social o familiar y/o escolar.
Este problema suele ser diagnosticado en estapas relativamente tempranas, en torno a los 3-4 años, existiendo mayor incidencia en niños con respecto a niñas de la misma edad.
¿Que podemos hacer los padres en estos casos? ¿Como debemos responder?
Los menores con Trastorno negativista desafiante están caracterizados por su resistencia y su capacidad de discusión, cuando expresan toda su ira y cólera, no se les debe hacer objeciones poque lo interpretan como una invitación a seguir la discusión. La cesión y negociación suele ser uno de las opciones a tomar en este tipo de problemas.
Los niños con esta problematica suelen echarle la culpa de todo a los otros, presentan aptitudes de prepotencia,  peleas físicas y en ocasiones se observan patrones agresivo-pasivo.
En determinados casos y sobre todo si influye negativamente en las relaciones familiares o sociales del menor, es recomendable poner el problema en manos de un especialista. Este nos orientará y dará las pautas de actuación necesarias,  para que el problema de comportamiento no se agrave, ni persista en el tiempo.



viernes, 18 de enero de 2013

LA DEPRESIÓN INFANTIL



La depresión infantil y adulta se identifica como una patología propia del estado de ánimo cuyas características fundamentales son una alteración del humor referida a sentimientos de tristeza o irritabilidad y un manifiesto desinterés por las actividades anteriormente placenteras.
Actualmente, los trastornos afectivos se reconocen como un problema importante de salud mental en niños y adolescentes. Cualquier niño puede sentirse triste en ciertos momentos, pero para hablar de un episodio depresivo, debe cumplir los criterios diagnósticos del DSM-IV o del CIE-10.
La sintomatología de la depresión infantil es la siguiente:
-Aspectos endógenos (internos): anhedonia, fatiga, lentitud psicomotora, retraimiento social, humor depresivo, anorexia, pérdida de peso, variación diurna e hipersomnia.
-Aspectos cognitivos negativos: autoimagen negativa, desesperanza/indefensión, ideación suicida y melancolía/preocupación.
-Aspectos de ansiedad: melancolía o preocupación, ansiedad por separación, insomnio, quejas somáticas, alucinaciones y agitación psicomotora.
-Aspectos de peso o apetito: aumentados o disminuidos.
-Aspectos de conducta alterada: ideación suicida, agitación psicomotora, trastorno de conducta y colera/irritabilidad.
La depresión infantil aparece principalmente en niñas de 5-6 años de edad, se mantiene durante bastante tiempo y suele detectarse primero en los centros educativos.
En los niños más pequeños se suelen presentar más sintomas de ansiedad, quejas somáticas, alucinaciones auditivas, rabietas y problemas de conducta. A medida que el nivel de desarrollo de su cognición aumenta, los niños mayores pueden ser capaces de mostrar componentes cognitivos de su estado de ánimo y una baja autoestima, así como sentimientos de culpa e infelicidad.
Los adolescentes, en cambio suelen presentar más problemas de apetito y de sueño, delirios, ideación o intentos de autolesión, así como una mayor repercusión funcional en su vida social y familiar que en los niños, tendiendo a presentar mayor irritabilidad que los adultos, en el mismo caso.
La depresión infantil se presenta en muchas ocasiones, asociada a otros trastornos como la ansiedad, problemas de conducta como la agresión y consumo de estupefacientes.
Las relaciones familiares de los niños con trastorno depresivo suelen caracterizarse por la existencia de conflictos, maltrato, rechazo y problemas de comunicación, no suele haber expresión de afecto ni apoyo. Puede ocurrir a su vez, que los padres estén pasando por una depresión o que padezcan otras enfermedades que les hagan ser menos efectivos a la hora de educar a sus hijos.
Es muy importante en el tratamiento tener en cuenta el contexto familiar del menor, las relaciones y el tipo de interacción que se lleva a cabo con el niño. Es importante para su evolución tener el apoyo de los padres, para aplicar en los casos en los que sea necesario, cambios en la interacción y modificaciones de conducta hacia el menor. Con el apoyo familiar y el tratamiento adecuado se pueden conseguir un buen pronóstico en la evolución de este trastorno.

LA FOBIA ESCOLAR


La fobia escolar se diagnóstica en aquellos niños que presentan una ansiedad excesiva y un rechazo o resistencia a acudir a la escuela, sin que este temor tenga que ver con el miedo a la separación, temor a situaciones sociales o vagancia.
La sintomatología que presenta es: nauseas, cefaleas, mareos, dolor de estómago y una gran ansiedad a la hora de ir al centro escolar o a clase.
En los casos más extremos estos sintomas se agudizan y se presentan incluso en las conductas anteriores que preceden al hecho en cuestión (levantarse, desayunar, vestirse etc.).
Cuando los padres le permiten quedarse en casa, debido a la sintomatología que presenta, esta desaparece, por ese motivo el objetivo debe ser que el menor vuelva al colegio.
Cuanto antes se enfrente a la situación y con la mayor normalidad posible mejor será.
El papel del profesor y de los padres es muy importante en esta situación, conociendo de antemano el hecho y dandole la importancia que merece, harán que el menor se enfrente a esta dificultad de la forma más comoda posible para él. Se trata de que la fobia vaya desapareciendo y el hecho pase de ser desagradable a ser neutral y con el tiempo placentero. Esto se debe conseguir de forma que el niño vaya cambiando los estimulos aversivos, por neutrales y posteriormente positivos.
La negativa a ir a la escuela puede aparecer de forma característica en dos momentos evolutivos:
-El inicio de la escolarización (en torno a los 3-4 años), se manifiesta de forma brusca y se caracteriza por presentar un buen pronóstico.
-Al inicio de la adolescencia (en torno a los 11-12 años), con mayor instauración y peor pronóstico, en algunos casos será necesario el tratamiento.

domingo, 13 de enero de 2013

¿QUE ES LA DEPRESIÓN?



Todo el mundo se siente triste a veces, pero una depresión es un estado más intenso y persistente. Durante una gran depresión, las personas se perciben desesperanzadas, desanimadas y el tiempo pasa muy despacio. Los seres queridos, la comida, el sexo, los pasatiempos, el trabajo y el ocio pierden su atractivo. Suelen aislarse de otros descuidando los deberes y responsabilidades. Algunas personas  se vuelven pasivas y letárgicas, otros inquietos y agitados.
Las conversaciones con las personas depremidas sugieren que son críticas con ellas mismas y están llenas de culpa, irritables e incapaces de adquirir control sobre sus vidas. Pausan mucho cuando hablan y se concentran de manera excesiva en ellos mismos. Suelen presentar fallos de memoria, recuerdan menos y tienen problemas para adquirir materiales nuevos.
Añadido a este sufrimiento está el tener un riesgo mayor para su salud, ya que las funciones inmunológicas se vuelven menos efectivas durante el estado depresivo.
Las personas con depresión que presentan sintomas graves pueden llegar a experimentar alucinaciones, experiencias sensoriales sin bases en la realidad, o escuchar voces que le acusan por ejemplo de pensamientos malignos.
También pueden tener delirios, creencias irracionales y pensar que por ejemplo su cuerpo se está pudriendo.
Los depresivos con sintomas más moderados pueden mostrar fatiga, pesimismo, autoestima baja, ansiedades, insomnio, culpabilidad e irritabilidad. Pueden llevar vidas bastante normales, siendo capaces de trabajar y mantener una familia.
Todas las depresiones no siguen un mismo desarrollo, algunas parecen un paseo por la montaña rusa, valles que alternar con estados de ánimo normales o casi normales, otras en cambio son más constantes.
Las personas que han tenido depresión gran parte de su vida, suelen estar insatisfechas y descontentas de manera crónica y sucumben de vez en cuando a depresiones profundas, cuando se enfrentan a tensión extraordinaria.
Es probable la recuperación de la depresión aguda, pero otras permanecen en el tiempo siendo más dificil su respuesta a las terapias. Las personas que se recuperan de las depresiones profundas, suelen hacerlo en los primeros meses de terapia.
Sin embargo las depresiones que tarde o temprano se acaban, pueden durar dos años o más. Las tensiones intensifican y prolongan las depresiones.
En las personas mayores el estado depresivo puede ser más común,  estar relacionado con el deterioro físico o cognitivo que se produce en estas edades, aún así la trayectoria personal -situacional y física de cada persona a lo largo de su vida y en el momento en el que se produce el episodio es crucial para su tratamiento.
Uno de los síntomas que puede presentar el estado depresivo es la apatía, siendo esta más frecuente en la 3ª edad,  aunque esta pudiera darse con o sin depresión, también requiere de tratamiento. La apatía puede ser indicativo no sólo de la presencia de depresión sino también de alguna lesión o enfermedad, por eso no debe siempre asumirse que es algo sólo cognitivo. Si se descartan factores médicos y se identifica una posible causa cognitiva, se debe buscar un equilibrio entre conseguir que la persona no se aisle y animarla a implicarse y participar en actividades que pueda tolerar. El nivel de implicación debe basarse en las características individuales, el diagnóstico y los deseos de la persona.
Debemos tener en cuenta que algunas variaciones como la irritabilidad, depresión o inquietud, pueden estar causadas en parte, por cambios producidos en el cerebro. Sin embargo este tipo de problemas responde, en gran parte, a cambios o variaciones en el entorno y/o fármacos. Un gran contribuyente es el estrés generado por la dificultad para comprender el entrono y a otras personas.
En la terapia se deberan tener en cuenta no sólo la trayectoria personal, sino la situación actual tanto cognitiva como conductual, para poder abordar el problema en todas sus dimensiones.
Conseguir que la persona vuelva a tener control sobre su vida y proporcionarle las herramientos necesarias para que pueda afrontar cualquier problema de forma objetiva es vital. Conseguir que se adapte a cada situación personal y situacional que pueda presentarse en cualquier etapa de su vida de la mejor manera posible, es el objetivo principal terapeútico.

martes, 8 de enero de 2013

¿QUE ES LA HIPERACTIVIDAD?



La hiperactividad siempre se ha entendido como la suma de movimientos desorganizados y caóticos. Pero ¿Es sólo eso o hay algo más'¿Que sintomas tiene? ¿Como podemos saber si nuestro hijo es o no hiperactivo? ¿A que edad aparecen estos sintomas y como podemos identificarlos o diferenciarlos?
La edad de inicio del trastorno de hiperactividad se situa entre los 2 o 3 años. Se estima que aproximadamente un 3% o 5% de los niños escolarizados son hiperactivos, la proporción de varones hiperactivos con respecto a niñas hiperactivas es de 5/1.
Para poder diagnósticar este trastorno es necesario que las conductas sean severas, inapropiadas para su edad, generalizadas a lo largo del tiempo (mínimo seis meses), que aprezcan en diferentes situaciones (mínimo dos) y que afecten significativamente a la actividad social, familiar y escolar del menor.
¿Que indicadores debemos tener en cuenta dependiendo de la edad, que nos puedan hacer pensar que puede tratarse de una hiperactividad?
Los indicadores que deberemos tener en cuenta dependiendo de la edad del los niños son los siguientes:
-De 0-2 años:
- Descargas mioclónicas durante el sueño.
-Problemas en el ritmo del sueño y durante la comida.
-Períodos cortos de sueño y despertar sobresaltado.
-Resistencia a los cuidados habituales.
-Reactividad elevada a los estimulos auditivos.
-Irritabilidad.
-De 2-3 años:
-Inmadurez en el lenguaje expresivo.
-Actividad motora excesiva.
-Escasa conciencia del peligro.
-Propensión a sufrir numerosos accidentes.
-De 4-5 años:
-Problemas de adaptación social.
-Desobediencia.
-Dificultades en el seguimiento de las normas.
-A partir de los 6 años:
-Impulsividad.
-Déficit de atención.
-Fracaso escolar.
-Comportamientos antisociales.
-Problemas de adaptación social.
Estos indicadores por si sólos no podría indicarnos que un niño/a efectivamente es hiperactivo, se deben tener también en cuenta además otros sintomas para poder llegar a diagnosticarlo.
¿Que sintomas serian?¿De que se quejan principalmente los padres y profesores cuando tienen un niño/a hiperactivo?
Los padres o profesores de niños hiperactivos se quejan principalmente de falta de concentración, de conductas que realizan y que no tienen nada que ver con las tareas que deberían estar haciendo y de falta de atención a las instrucciones que se les da. Muchas veces también se quejan de que no paran de moverse, son muy nerviosos, suelen tener muchos accidentes o golpes, empujan a sus compañeros etc. Suelen quejarse de impulsividad y que no ven los peligros o saben pararse a pensar.
Los niños/as suelen tener deficiencias en tres niveles: en la capacidad de atención, en el desarrollo y ejecución de sus conductuas y en niveles de planificación o ejecución mental, traducidos en impulsividad. La sintomatología en estas tres áreas es la siguiente:
- Problemas en la capacidad de atención : los niños con este deficit son incapaces de sostener la atención y cambiarla adaptativamente, cuando es necesario. No ejecutan ni enfocan eficientemente la capacidad de atención.
Un aspecto que cabe señalar, es que en algunas situaciones, son capaces de permanecer sentados y concentrados durante mucho tiempo y esto se ha relacionado con el hecho de que esten motivados y les guste la actividad. Por tanto es en tareas aburridas y monótonas cuando pierden la concentración.
-Problemas desarrollo y ejecución de sus conductas: estos niños suelen caracterizarse por un exceso de actividad  y además inoportuna, por un movimiento desorganizado y carente de objetivos.
Se distinguen  por presentar una imposibilidad de iniciar y llevar a cabo patrones de conducta dirigidos a una meta,es decir, por la imposibilidad de seguir una secuencia desconocida de actos dirigidos a un fin, en donde el niño/a pone en juego las alternativas que se le presentan y debe decidirse por una.
Este tipo de sintomatología depende de más de la situación, observandose que son más probables en situaciones sedentarias o muy estructuradas que en ambientes relajados, con menor demanda externa.
-Problemas de impulsividad: se caracterizan por intentar resolver un problema, sin planear como se llevará a cabo. Suelen tener  un estilo rápido e incorrecto a la hora de resolver problemas, son incapaces de pararse a pensar antes de actuar y manifiestan conductas incontroladas, sin pensar en las posibles consecuencias.
Es tipo de trastornos suelen llevar otros asociados como:
-Alteraciones conductuales y en las relaciones sociales: suelen ser niños molestos, intratables, perturbadores, desobedientes, habladores,socialmente activos, ruidosos, energicos y agresivos física y verbalmente. Suelen tener problemas con los compañeros y para participar en juegos cooperativos y ajustar su comportamiento a las normas o reglas de los mismos
-Problemas escolares y de aprendizaje: suelen tener presencia del deficit de atención, dificultades de lectura, problemas con la ortografía y con las matematicas. El fracaso escolar es mucho más importante, parece que no alcanzan lo que posiblemente son capaces de aprender. Suelen llevar más asignaturas pendientes de otros cursos o supender más.
-Trastorno del lenguaje y de la comunicación: puden presentar un retraso simple del lenguaje, problemas de lenguaje expresivo, dificultad de reflexión, dificultad en la regulación de la conducta y son menos eficientes en la organización del lenguaje.
-Alteraciones en la memoria, los procesos ejecutivos y otras habilidades cognitivas: suelen tener problemas en la aplicación de estrategias ejecutivas y organizativas en tareas próximas en el tiempo. Presentan dificultades en organizar tareas en el tiempo y en anticipar.
-Incoordinación muscular: presentan torpeza en movimientos gruesos y finos, incoordinación e inmadurez motora.
-Inmadurez emocional.
-Temparamento fuerte.
-Labilidad psíquica.
-Mayores problemas de salud o accidentes.
-Problemas de sueño: dificultades en la iniciación del sueño y despertar precoz.
-Síntomas afectivos y de ansiedad: excitabilidad, fácil tendencia a la frustración, cambios de humor, ansiedad, depresión y baja autoestima.
Desde el punto de vista profesional es importante tener en cuenta estos síntomas para el posible tratamiento médico, psicopedagógico o logopedico, dependiendo de la sintomatología de cada caso. En el mayoría de los casos el pronóstico suele ser bueno, si se trata de forma adecuada, no sólo a nivel clínico, sino también familiar y escolar.

lunes, 7 de enero de 2013

LOS NIÑOS CON TRASTORNO EN EL LENGUAJE EXPRESIVO

¿Que es el trastorno en el lenguaje expresivo?
Los niños con este tipo de trastorno tienen una capacidad intelectual normal, cuando se evaluan factores intelectuales no lingúisticos y habilidades de comprensión del lenguaje, que también son normales. Comprenden bien cualquier tipo de mensaje, aunque no pueden llegar a expresarlo correctamente, principalmente por: 
-Un habla limitiada, con un vocabulario más reducido de lo que es normal para su edad.
- Presentan una dificultad para la adquisición de palabras nuevas. El proceso de adquisición es más lento.
- Las frases que utilizan son excesivamente cortas, en algunos casos incluso telegráficas.
- Las estructuras gramaticales que emplean son incorrectas, frases mal construidas.
Este trastorno puede estar asociado en determinados casos y dependiendo de la gravedad, a un retraimiento social (niños más tímidos, que les cuesta  interaccionar con los demás) o al trastorno por deficit de atención con hiperactividad (niños con dificultad en mantener una atención sostenida y más inquietos).
En edad escolar  estos niños que pueden presentar problemas de aprendizaje en la adquisición del proceso lecto-escritor, principalmente al escribir dictados, copiar frases o en ortografía, pudiendo llegar a confundirse más de lo normal.
Este tipo de trastorno suele identificarse cuando se inicia la escolaridad en un 10-15% de los casos, hacia los tres años. En sus formas más leves, pueden incluso identificarse al inicio de la adolescencia.
La recuperación es prácticamente total, aunque en algunos casos se necesite algo de apoyo psicopedagógico. En una proporción muy pequeña de los casos, este deficit persiste hasta la edad adulta.
 El trastorno en el lenguaje expresivo puede ser:
- Evolutivo: se produce por un retraso en el desarrollo normal del lenguaje, no estando asociado a ninguna lesión cerebral. Los niños inician su habla de forma tardía y progresan con más lentitud de lo normal en su lenguaje expresivo. Aunque posteriormente alcanza el nivel normal, adecuado a su edad. Este tipo de trastorno es más probable en aquellos que tienen una historia familiar previa.
- Adquirido: se manifiesta como una insuficiencia del lenguaje expresivo, tras un periodo de desarrollo normal, resultado de una enfermedad neurológica. En estos casos este problema se presenta asociado a otros (anomalias en la articulación motora, errores fonológicos, habla lenta, repeticiones silábicas, entonación monótona).
Este tipo de dificultades puede interferir en el rendimiento académico y social normal del niño, por lo que en algunos casos es recomendable un tratamiento psicopedagógico.
Con una correcta evaluación debe diferenciarse de trastornos del lenguaje asociados a retraso mental, déficit sensorial o privación ambiental.