CAPACIDAD DE LIDERAZGO: ESTUSIASMO Y PASIÓN

Lo único que necesitamos para ser realmente felices es algo por lo que entusiasmarnos" Charles Kingsley.

Hay personas que parecen haber nacido con una capacidad natural para ilusionarse con los proyectos que emprenden, contagiar su pasión por lo que hacen y vivir en su propia piel las aventuras de los demás, pero esta virtud puede cultivarse y es una cualidad muy valorada en el trabajo y en las relaciones sociales.

Las personas entusiastas saben encontrar en cada situación el beneficio o la ventaja, incluso cuando el viento no corre de su parte, saben centrar su atención en lo positivo. Lo único que necesitamos para ser felices es algo por lo que entusiasmarnos.

Las personas con capacidad de liderazgo saben vencer los obstáculos, sin perder el ánimo o la esperanza en el camino.Liderar no es sólo conseguir que unas personas cumplan los objetivos, es capacitarles para que lo hagan. ¿Pero como hace esto un líder? Estimulando el esfuerzo que realizan y apoyándoles en su colaboración. El líder consigue que broten energías nuevas en pozos que parecían agotados.

El líder además, transmite el convencimiento de estar haciendo algo grande, algo con sentido. Lograrás tus objetivos como jefe o responsable, si las personas que trabajan codo a codo contigo, se comprometen y emocionan con lo que hacen.

Todas las personas independientemente de la formación y el puesto que ocupen necesitan sentirse necesarias, para conseguir que un grupo sea efectivo en su trabajo y consiga sus objetivos, el líder deberá saber valorar lo que cada cual aporta al conjunto. El líder debe ser puente y fomentar un buen ambiente de trabajo, donde no haya lugar para las enemistades.

En la flexibilidad y la escucha se encuentran otra de las herramientas de éxito del líder, es importante que existan seguidores pero también que surjan más personas con capacidad de liderazgo, para llevar al éxito cualquier proyecto empresarial.

Desarrollar la habilidad de liderazgo, nos puede ayudar a tener éxito en muchas facetas de nuestra vida, no sólo en la laboral, sino también en la personal con la familia o amistades. La clave está en saber ceder espacio a los que colaboran con nosotros en la consecución de un objetivo o tarea, tratar  siempre de unir fuerzas, valorando a cada persona por lo que aporta, de esta forma conseguiremos emocionar y motivar.

"Los hombres no viven juntos porque sí, sino para acometer juntos grandes empresas"