RELACIÓN DE APEGO FIRME

"Es importante que los padres tengan experiencias y sentimientos integrados, con respecto a sus propias relaciones familiares. Si los lazos no son agradables, se debe aceptar y elaborar un nuevo modelo de relación sana padre-hijo".

Las investigaciones sugieren que los niños forman fuertes vínculos con sus padres, cuando estos interactúan de forma frecuente con ellos. El contacto físico sostenido, es de particular importancia para los bebes.

Otra fuerte influencia que hace que se desarrolle una vinculación, es hacia quien se encarga de cubrir las necesidades y ritmos especiales del niño.

Los vinculos firmes dependen también de las características del niño. Los bebes que tienen dificultades para adaptarse a situaciones novedosas y lloran mucho, son difíciles de manejar desde que son pequeños. Algunos estudios parecen indicar, que es menos probable que estos niños establezcan lazos firmes.

¿Como afectan las separaciones breves padres-niño, a los vínculos entre ellos? Las consecuencias suelen depender de varias condiciones, incluyendo la naturaleza de la relación del bebé y quien se encarga de él, la edad a la que se da la separación, la causa de la misma y el ambiente en el cual se ubica el niño.

Hasta los 3 meses de edad, el bebé no reconoce la expresión facial característica de su madre, a esta edad en cambio, ya si que se muestra alterado cuando ella actúa deprimida.

A los 6 o 7 meses de edad, el vinculo con los padres es inconfundible y se puede extender el apego hacia otros miembros de la familia.

Los niños que muestran un patrón de apego o vinculo firme durante el primer año, por lo general presentan habilidades sociales en toda la niñez temprana. Los niños vinculados con firmeza, en la guardería tienden a ser más agradables, activos en lo social y se integran libremente.

Parece ser que la sensibilidad y la estimulación paternal, fomenta la competencia social en los niños y les enseñan a que a menudo, el mundo es predecible y ellos tienen un impacto sobre él. El tener fe en los adultos se traduce en el niño en forma de confianza en si mismo, si además le transmiten al niño, que ellos sólos pueden manejar nuevas experiencias de manera hábil. Los niños que muestran confianza en sí mismos, persisten cuando se enfrentan a una frustración y muestran una orientación hacia la resolución de problemas.

El papel del padre es tan importante como el de la madre, a la hora de formar el vinculo afectivo y también parece influir la relación estable, que se establezca desde el principio en el entorno familiar. Es importante que desde el principio, los dos padres se vinculen en el cuidado del niño, ya que cuando el padre se involucra de manera activa y es sensible con su hijo, los niños muestran más capacidades sociales y de solución de problemas y menos miedos a las personas extrañas y situaciones nuevas.

Los hombres parecen también desempeñar un papel importante en el desarrollo intelectual temprano de sus hijos, cuando les dedican tiempo a sus inquietudes cognoscitivas. En las niñas la conversación es especialmente importante, en su desarrollo intelectual.

Al conversar y jugar con los niños se estimula la conducta competente y la formación de habilidades sociales, cuando la relación de apego es firme, el niño se adapta de forma correcta a diferentes situaciones.