LICENCIADA EN PSICOLOGÍA.UNIVERSIDAD AUTONOMA DE MADRID 1998. PSICOPEDAGOGA.UCM.2005

miércoles, 17 de julio de 2013

¿CUANDO ES NECESARIA UNA ATENCIÓN E INTERVENCIÓN TEMPRANA EN NIÑOS/AS?



Los primeros años de vida en el ser humano son cruciales para un adecuado desarrollo biológico, psicológico y social de la persona.

Las experiencias que vivimos en los primeros años de nuestra vida nos marcan para siempre, de ahí la importancia de conocer exhaustivamente la etapa infantil.

Cuando existen ciertos indicios en el bebé de la existencia de trastornos congénitos, metabólicos, madurativos o de otra índole o posible riesgo de padecerlos, una atención e intervención precoz mejora, en gran medida, las posibilidades de desarrollo biopsicosocial de los niños/as.

Es importante evitar, no sólo que esos déficits interfieran en la vida del niño, sino  evitar su aparición actuando sobre factores biológicos o situaciones de deprivación socioambiental, que puedan provocar su aparición.

Mediante la atención temprana, se detecta de forma precoz las enfermedades, trastornos o situaciones de riesgo. Se trata de paliar las consecuencias derivadas de trastornos o patologías metabólicas, neurológicas, genéticas o evolutivas del niño.

La atención temprana es  un conjunto de intervenciones dirigidas a la población de 0 a 6 años, a la familia y al entorno, que tiene como objetivo dar respuesta lo más pronto posible, a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen riesgos de padecerlos.

Hoy en día es innegable la influencia sobre el niño de variables de gran relevancia en su desarrollo, como el estado emocional de la familia, apoyos sociales, entre otros, siendo importante tanto en la evaluación como en el tratamiento en estos casos.

La neurorehabilitación o rehabilitación temprana, es una de las áreas también de gran relevancia en el tratamiento, la activación y el aprovechamiento funcional de las estructuras del sistema nervioso central, es crucial para que estos niños lo conserven con su funcionalidad normal.

El diagnóstico precoz de cualquier déficit, permite iniciar un trabajo de forma temprana en los niños/as y es tanto más eficaz, cuanto más temprana sea, puesto que la capacidad de asimilar nuevas experiencias, es mucho mayor en etapas precoces del desarrollo, gracias a la posibilidad de aumentar las interconexiones neuronales, en respuesta a la estimulación del ámbiente. La intervención facilita su proceso madurativo, permite a los niños alcanzar el máximo nivel de desarrollo e integración social.

Es importante también tener en cuenta, que el proceso de maduración del cerebro no finaliza con el nacimiento, sino que continua desarrollándose durante un tiempo, siendo además susceptible de modificación a base de un duro trabajo y esfuerzo.

También se debe saber que, los factores ambientales del niño, como la escasez de recursos o falta de estimulación, pueden influir en el desarrollo de un posible déficit al que se es propenso.

Cuando se realiza una atención temprana, no es porque neceseriamente el niño/a presente una discapacidad o minusvalía, sino para que en el caso de que sean propensos esta pueda evitarse. El principal objetivo es favorecer el desarrollo y el bienestar del niño y su familia, posibilitándole de forma más completa en el presente y futuro, su integración en el medio familiar escolar y social, así como su autonomía personal.

En la prevención e intervención temprana se trabajan áreas como la cognitiva, autonomía, lenguaje o comunicación, motora, además de asesorar, orientar e intervenir de manera individual y/o grupalmente a las familias que tienen algún hijo con discapacidad o riesgo de padecerlo.

Los niños/as propensos a recibir una atención infantil temprana son:
  •  Niños/as con trastornos en el desarrollo motriz o que puedan llegar a desarrollarlos.
  • Con trastornoso principios de trastornos cognitivos.
  • Niños/as con principios de trastornos del lenguaje.
  • Niños/as con trastornos sensoriales o que se piensen que puede padecerlo.
  • Niños/as con trastornos generalizado en el desarrollo.
  • Niños/as con trastornos o principio de trastornos de conducta.
  • Niños/as con trastornos emocionales.
  • Niños/as con tendencia a la expresión somática.
  • Niños/as con trastornos evolutivos del desarrollo.
  • Niños/as que durante su período pre, peri o postnatal o durante el desarrollo temprano, han estado sometidos a situaciones, que podrían alterar su proceso madurativo, como puede ser la prematuridad, el bajo peso o al anoxia al nacer.
  • Niños/as de riesgo psicosocial, que viven en condiciones sociales poco favorecedoras, con falta de cuidados o interacciones inadecuadas con sus padres y familia, maltrato, negligencias, abusos, que pueda alterar su proceso madurativo.
En ocasiones por parte de los padres , suelen surgir actitudes poco adecuadas, ansiedad, falta de competencia para asumir las responsabilidades que conlleva las necesidades especiales de su hijos. La intervención y atención temprana, se encarga de reducir o modificar estas conductas, de forma que no se produzca una influencia negativa sobre el desarrollo del niño. Permite además confirmar la mejora del desarrollo global del niño, eliminando o disminuyendo las alteraciones que el niño padece, así como los provocados por situaciones de privación social, contribuyendo también a formar a los padres en esta materia.

Mediante la evaluación e intervención psicológica, en logopedia, pedagogía y psicopedagogía, se realiza un diagnóstico prenatal en el que se tiene en cuenta la detección de las metabolopatías congenitas, detección precoz de signos de alerta del desarrollo en el seguimiento de la salud infantil y en el seguimiento neuroevolutivo de riesgo psiconeurosensorial, detección precoz de la hipoacusia congénita, etc.

Conociendo las capacidades y habilidades del niño y la forma en que vive y se organiza la familia, se puede llevar a cabo el programa de tratamiento individual más adecuado, para cada niño dentro de su familia. Las intervenciones globales donde se tienen en cuenta los diversos factores, sociales, familiares, biológicos,psicológicos del niño y su entorno, son más eficaces sobre todo si el comienzo de la intervención se realiza pronto. Los niños suelen obtener puntuaciones superiores en el desarrollo intelectual y el rendimiento académico posterior y los beneficios se mantienen a largo plazo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario